Las mascotas o animales domésticos pueden
ser un elemento importante para el desarrollo del niño en todos sus aspectos:
físico y afectivo.
A pesar de todas las ventajas que pueda
suponer el tener una mascota en casa debemos sopesar los riesgos y conocerlos
para poder prevenirlos adecuadamente.
Se debe elegir una mascota que se
adapte al modo de vida familiar y a las condiciones del hogar. Las preferencias
de los niños en la elección de una mascota son: perros, gatos, hámsteres,
tortugas y peces.
Recomendaciones
y cuidados para tener las mascotas en casa con los niños:
─ Con la mayoría
de mascotas siempre existe el riesgo de mordeduras o arañazos, por lo que
se debe amaestrar bien al animal y educar al niño para que lo respete y no lo
moleste cuando el animal está comiendo o durmiendo. Si se compra una mascota se
debe elegir una raza pacífica, que tenga un temperamento adecuado para
estar con niños.
─ El mayor riesgo de
una mordedura o de un arañazo es la infección de la herida y el contagio de
infecciones. Es muy importante tener al animal muy bien vacunado, llevarlo
regularmente al veterinario y, si le causa alguna lesión al niño, llevarlo al
Pediatra inmediatamente.
─ Es importante tener
al animal con unas óptimas condiciones de higiene ya que pueden ser
transmisoras de hongos (tiñas) y pulgas. No se debe dejar al niño tocar los
excrementos de los animales y siempre se debe lavar las manos después de tocar
al animal.
─ Las familias que
tienen niños alérgicos o atópicos deben evitar los animales de pelo (perros,
gatos, caballos) y pluma (pájaros) ya que estos niños tienen mayor
predisposición a sensibilizarse y a volverse alérgicos a estos animales.
─ No debemos dejar
nunca al niño solo con la mascota. Como última pincelada la responsabilidad
final del cuidado del animal es de los padres y no del niño