El pie plano es consecuencia
de la falta de desarrollo de los ligamentos de la planta del pie que forman el
arco plantar de los niños. La huella que deja el pie plano es fácil de
reconocer porque carece de la curva característica del pie o la tiene menos
pronunciada.
Las principales causas del pie
plano son: hacer caminar al niño a una edad que aún no corresponde, cuando no
se le pone el zapato adecuado y también hay tendencias a ser heredados. El pie
plano flexible o asintomático, que se presenta en el 80% de los niños puede
estar en esa etapa hasta los cinco años de edad.
El tratamiento consiste en
ejercicios para fortalecer los músculos del arco plantar del pie, también es
recomendable el uso de las plantillas o calzado ortopédico, de acuerdo al grado
del defecto que presente. Se puede aconsejar una serie de ejercicios como por
ejemplo, andar descalzos por la hierba o la arena, caminar de puntillas e
incluso agarrar objetos con los dedos de los pies; también es bueno controlar
el sobrepeso de los niños.
Estos sencillos ejercicios
ayudan a formar el arco y por lo tanto previenen la aparición del pie plano, más
aun cuando en muchos casos se ha demostrado que este tipo de alteración es
hereditario.